Pastor Mario Cano
En la obra del Señor, siempre va a haber ataques del enemigo. Estos ataques no siempre son directos, sino que Satanás tiene diferentes estrategias para intentar detener el trabajo. Como un caballo de Troya, estos obstáculos pueden llegar a nuestras vidas sin que nos demos cuenta hasta que es tarde. Es por ello que uno de los factores determinantes para el avance es tener un líder enfocado.
Cuando un líder se desenfoca, va a tomar decisiones que le lleven a invertir tiempo y recursos que no le llevan por el camino correcto. Antes de llegar a este momento, debemos reflexionar sobre qué fundamento estamos basando nuestras acciones.
De Nehemías aprendemos que sólo el conocimiento profundo de las Escrituras y una comunión continua con el Señor nos puede guíar a un servicio correcto dentro de la obra.